Riccardo Tafà es el Director General y fundador de RTR Marketing Deportivouna agencia de marketing deportivo que celebra 25 años de trabajo en el automovilismo, concretamente en Fórmula 1 y MotoGP, y que cuenta con colaboraciones con grandes como Williams, McLaren, Ducati, Yamaha, Honda y muchos otros. La agencia de Tafà, que comenzó su andadura en Londres a mediados de los 90 en el ámbito de las relaciones públicas, es una realidad que ha sabido cabalgar los cambios a lo largo de los años, aceptarlos y comprenderlos, manteniéndose así como un actor relevante en el mundo del patrocinio deportivo: todavía hoy RTR es uno de los socios de confianza para los organizadores del MotoGP y Fórmula 1 de MotoGP y Fórmula 1.
Riccardo Tafà: 25 años es una meta envidiable en el mundo del patrocinio deportivo. ¿Cómo ha evolucionado tu sector en este periodo?
El mundo ha cambiado mucho, y bastante, desde los años 90 hasta hoy. Cuando empecé, con la Fórmula 1, la situación económica era muy positiva y favorable, tanto en Europa como en Italia: entonces los patrocinios eran “tradicionales” y no iban mucho más allá de la exposición de la marca. Superar la idea del patrocinio tradicional fue mi obsesión y mi objetivo, desde el principio, y el camino principal fue el trazado por la creatividad y la flexibilidad. Siempre hemos intentado crear nuevas formas de colaboración y asociación con las empresas, anticiparnos a los cambios tecnológicos, buscar todas las oportunidades posibles incluso durante las grandes crisis económicas. Y siempre hemos estado dispuestos a cambiar nosotros mismos cuando ha sido necesario.
¿Es esto lo que está ocurriendo ahora, un momento profundamente afectado por la pandemia del Covid-19?
Nadie podía predecir esta pandemia, y especialmente sus efectos a corto plazo. Pero nos hemos equipado, como todo el mundo, para intentar ofrecer nuevas respuestas a preguntas que eran nuevas para todos, incluso para nosotros. En los años anteriores hemos insistido mucho en el desarrollo digital, y hasta ahora está dando sus frutos, porque nos hemos encontrado en mejor posición que otros. Para nuestros socios, pues, hemos pensado en soluciones y oportunidades innovadoras: acabamos de lanzar, en colaboración con Visiva, “Sponsorsim“, una app de “simulación” de patrocinio con realidad aumentada que permitirá a los equipos gestionar los patrocinios a distancia.
¿Qué año será para el automovilismo?
El choque inicial de esta pandemia ha golpeado inevitablemente a muchos sectores, que se enfrentaron y aún se encuentran en crisis. Ahora nos encontramos en una fase más “madura” de la gestión de la pandemia, en la que nos preguntamos a todos los niveles cuándo y cómo volveremos realmente a empezar. En este contexto incierto, el automovilismo ha sido uno de los pocos deportes que ha seguido adelante: los campeonatos de 2020 ya han concluido, y los calendarios de MotoGP y Fórmula 1 de 2021 ya están listos para empezar. Faltarán algunas piezas del puzzle, pero volveremos a empezar en marzo.
No habrá eventos en directo y, sobre todo, serán a puerta cerrada: ¿afectan estos elementos al mercado del patrocinio deportivo?
Sí, no tiene sentido ocultarlo. Las activaciones en el campo y los eventos se encuentran entre las oportunidades más importantes para muchas empresas que invierten en el deporte. Los deportes que mejor lo están haciendo hasta ahora son aquellos en los que los derechos televisivos pueden cubrir los costes de la organización: NBA, NFL, fútbol americano, tenis, MotoGP y Fórmula 1. Entre éstos, los que tienen menos o ningún contacto son los privilegiados debido a la creación de “burbujas” seguras y a la menor facilidad de transmisión de Covid-19 los menores cambios imprevistos de acontecimientos en el calendario. En este sentido, el MotoGP y la Fórmula 1 siguen siendo una plataforma extraordinariamente interesante para invertir en patrocinios: faltan algunas partes, pero se puede ganar visibilidad de otras maneras. Paradójicamente, éste podría ser “el mejor peor momento de la historia” para invertir en el automovilismo.
El mejor peor momento… ¿significado?
Podemos considerar 2021 como el año de la siembra, y los años siguientes como aquellos en los que se recogerán los frutos maduros de las nuevas asociaciones: ésta es una idea compartida en el sector, y los equipos y directivos están mostrando una gran flexibilidad a la hora de comunicarse con las marcas. Además, interpretando los datos de MotoGP, se puede prever la tendencia del futuro próximo: en 2020 la audiencia ha aumentado, la gente está pegada al televisor, y estas cifras están destinadas a seguir creciendo. En este momento, la duración de la actividad a pesar de Covid garantiza la estabilidad de estas cifras, junto con el crecimiento de la visibilidad en los medios de comunicación.Crecerá el número de aficionados y, por tanto, de interesados en los productos. A medio plazo, en cuanto se puedan reabrir las puertas al público, habrá “hambre de eventos”, lo que determinará una fuerte respuesta de los clientes. Hoy en día, las actividades digitales y las redes sociales son aún más importantes que antes y serán esenciales para mantener a los usuarios cerca del producto. Por último, no hay que olvidar que el deporte sigue siendo una importante herramienta B2B para las empresas, sobre todo en un año en el que el B2B quedará prácticamente borrado. Cuando patrocinas a un equipo, de hecho, pasas a formar parte de un club restringido de personas para las que los equipos organizan días virtuales de patrocinio, seminarios web y otras oportunidades de debate e interacción en esta etapa.
El automovilismo sigue siendo uno de los escaparates más importantes del mundo, ¿verdad?
Por supuesto, y no sólo en términos de exposición de la marca, sino también de credibilidad. Son plataformas itinerantes capaces de crear brechas de mercado en muchos países del mundo, y de crear una comunicación directa con los clientes en los mercados de referencia. En cuanto a los clientes, algunas cifras pueden darte una idea del poder de la plataforma: El 80% de la audiencia de MotoGP reconoce una marca como patrocinador, y el 70% compra los productos que se ven en el campeonato del mundo. Esto significa que cada euro invertido en estos deportes resulta mucho más rentable que cualquier actividad de comunicación tradicional. El usuario y el espectador de MotoGP y Fórmula 1 no se ven interrumpidos ni distraídos por el patrocinador: la marca forma parte de la acción deportiva, aparece ahí pero sin distraerte. Y además, hay una organización profesional en todas sus partes, para mejorar el resultado. La colaboración de equipos, entidades organizadoras y asesores como RTR, tiende a crear un círculo virtuoso: el fantástico, rápido y chispeante mundo de las dos y las cuatro ruedas se hace progresivamente realidad, es una especie de gran familia en movimiento…