Nos complace publicar en nuestras páginas la entrevista de Matteo Senatore a nuestra Directora Asociada Silvia Schweiger sobre la crisis de KTM que apareció en Fórmula Pasión. Lee el artículo original en italiano aquí.
Para desentrañar mejor el caos financiero que rodea al fabricante de Mattighofen, entrevistamos a Silvia Schweiger, Directora Asociada de Marketing Ejecutivo y Comercial de RTR Sports Marketing.
Durante este primer mes del parón invernal de MotoGP, la atención de todos los medios de comunicación se ha centrado, comprensiblemente, en la confusión financiera que rodea a la fábrica KTM, que recientemente ha entrado en suspensión de pagos. La deuda total se estima en 2.900 millones de euros. Se han anunciado 300 despidos, que se suman a los recortes de personal ya efectuados en primavera.
En este contexto, está claro que el mismo compromiso del fabricante austriaco con MotoGP está amenazado. Carlo Pernat, director de Enea Bastianini, el nuevo fichaje del equipo, explicó cómo las cuatro motos deberían salir regularmente a la pista el año que viene, pero es probable que no haya ningún desarrollo técnico durante la temporada.
Para comprender mejor esta delicada situación desde el punto de vista financiero, del patrocinio y de los contratos de los pilotos, hemos entrevistado a Silvia Schweiger, Directora Asociada de Marketing Ejecutivo y Comercial de RTR Sports Marketing, una conocida agencia de patrocinio deportivo con 30 años de experiencia en MotoGP y en el automovilismo en general.
Hola Silvia, y gracias por aceptar esta entrevista con FormulaPassion.it. En primer lugar, me gustaría preguntarte: ¿hasta qué punto es difícil para un patrocinador que invierte en un equipo de MotoGP hacer frente a una emergencia tan grave y particular como la que está afrontando KTM?
Desde luego, no es la situación óptima. Sin embargo, hay que tener en cuenta que en el patrocinio moderno -especialmente en campeonatos como MotoGP- los patrocinadores son verdaderos socios y participan en las conversaciones sobre el futuro de la propiedad deportiva. No suelen enterarse de estas noticias por los periódicos, sino por la relación diaria con el equipo y sus asesores.
Así que espero que el equipo primero les haya tranquilizado y ahora esté pensando en estrategias para ofrecer el valor prometido a los patrocinadores más allá de los eventos.
Por supuesto, no es fácil, pero hay que buscar formas de minimizar los daños.
Yo diría, más aún a la luz de estas situaciones, que es crucial que los patrocinadores cuenten con el apoyo de profesionales serios que les ayuden a evaluar cuidadosamente todas las oportunidades antes de invertir en un patrocinio, durante el patrocinio y en los momentos más delicados y complejos.
¿Existe, en tu opinión, el riesgo de que los agentes y patrocinadores de los distintos jinetes presionen para que se rescindan los contratos de sus clientes y para que se vayan a otra parte si no reciben las garantías adecuadas?
Los agentes de los pilotos -porque éste es su trabajo- mantienen siempre conversaciones abiertas en varios frentes, manteniendo y cultivando relaciones con múltiples partes. Su objetivo es mantener a su cliente en la máxima categoría de las carreras de dos ruedas y en la mejor situación competitiva posible. Es normal que las conversaciones se adapten a medida que se desarrollan los acontecimientos.
De ahí a presionar para que se rescindan los contratos hay un gran salto. Por un lado, los contratos -sobre todo los modernos- son instrumentos jurídicos sólidos y bien redactados, con poco margen de maniobra; por otro, hay que tener cuidado, porque donde se cierra una puerta puede abrirse otra.
También comprendo que los patrocinadores personales de los pilotos puedan tener dudas o reservas, pero si hay contratos en vigor, deben respetarse.
El papel de una agencia independiente como la nuestraes encontrar la mejor asociación para el cliente en función de sus objetivos y apoyarle en todo momento. Si por cualquier motivo deja de ser así, analizamos los hechos y evaluamos las alternativas, respetando siempre los acuerdos y contratos existentes.
¿Es realista, en tu opinión, pensar que Red Bull, por muy gigante mundial que sea, podría financiar todo el negocio de MotoGP de KTM? Y desde su punto de vista, ¿tendría sentido hacerlo?
Red Bull ha declarado públicamente que desea lo mejor para KTM, pero que no apoyará financieramente la crisis de la empresa. Así pues, lo que ocurra en Mattighofen seguirá siendo asunto de Stefan Pierer y su equipo.
La propiedad de los equipos, por otra parte, es un tema ligeramente distinto, que, como sabemos, es históricamente más interesante para la empresa de bebidas energéticas. Sin embargo, es poco probable que reproduzcan lo que hicieron en la Fórmula 1, ya que la marca se encuentra ahora en una fase histórica diferente. No se trata tanto de una cuestión económica -sería una gota en el océano para ellos- como de valor y estrategia.
Sin embargo, podrían plantearse la copropiedad o un proyecto compartido.
¿Qué impacto podría tener una situación así, especialmente si se deteriorara aún más a nivel deportivo, en la imagen general de MotoGP?
MotoGP es un deporte sano y en crecimiento. El interés de Liberty Media, el cambio de marca y las innovaciones introducidas son claros ejemplos de ello.
La crisis de KTM es un problema, por supuesto, pero no debemos confundir el continente con el contenido. Hace años, Suzuki abandonó MotoGP tras ganar un campeonato del mundo poco antes y ganar la última carrera antes de retirarse. Fue un mal golpe, pero el mundo no se derrumbó, y tampoco se derrumbará esta vez.
Desde luego, el tema del número mínimo de motos en la parrilla sigue abierto: si salieran las cuatro KTM, serían 18 pilotos en pista. Pero hay otras posibilidades. Creo que algún inversor intervendrá para apoyarlas.
Hace tiempo que se habla de la posible entrada de otros fabricantes -me viene a la mente BMW- en MotoGP, quizá con el nuevo reglamento de 2027. En tu opinión, ¿podría esto tener algún impacto? ¿De qué tipo?
MotoGP es codiciado por muchos otros fabricantes, y no es ningún secreto que Dorna y los órganos de gobierno recibirían a nuevas marcas con los brazos abiertos.
La razón por la que muchos grandes grupos no se inscriben en el Campeonato del Mundo no es económica, sino de rendimiento: nadie quiere salir a la pista y estar a un segundo por vuelta de sus rivales.
BMW ha tenido recientemente una campaña muy exitosa en SBK, ganando un título importante, gracias en parte al extraordinario año de Razgatlioglu. Aunque está claro que BMW ha invertido mucho en el mercado de los superdeportivos de carretera, queda por ver si confirmará su interés por los prototipos.
No creo que la posible salida de KTM incentive a otros fabricantes a entrar en MotoGP.