Niki Lauda fue tres veces campeón del mundo de
Campeón del Mundo de Fórmula Uno
empresario de éxito y entusiasta de la aviación. La vida de Lauda ha estado salpicada de grandes logros en todos los campos, rivalidades tumultuosas y experiencias increíbles. En las siguientes líneas intentaremos resumir una vida plena, explorando la carrera de Lauda en la Fórmula Uno, su vida privada y sus contribuciones al deporte más allá de su tiempo en la pista.
Los primeros años
Niki Lauda nació enViena( Austria) en 1949. Su familia era acomodada y su padre, Ernst, un próspero hombre de negocios. Al principio, sus padres querían que Lauda trabajara en la banca, pero a Niki le apasionaban los coches de carreras. Comenzó su carrera automovilística en 1968, pilotando para March Engineering en la Fórmula 3, y en sólo tres años debutó en la Fórmula 1 en el Gran Premio de Austria de 1971. 1971 fue un año dedicado a la Fórmula 2, realzado por el debut en la F1, única carrera de la temporada en la máxima categoría.
En 1972, Lauda trabajó a tiempo completo para el equipo March en los campeonatos europeos de Fórmula 2 y Fórmula 1. En aquella época no era raro que los pilotos corrieran en más de una categoría, ya en la década de 1970 había más de 20 carreras en 12 meses. Las primeras temporadas de Lauda en la Fórmula 1 fueron difíciles, Niki luchó por encontrar un coche competitivo, pero en 1974 fue fichado por la Scuderia Ferrari y su suerte cambió radicalmente.
Rivalidad en la pista
En 1975, Lauda, en su segundo año con Ferrari, ganó su primer Campeonato del Mundo dominando la temporada, ganando cinco Grandes Premios y subiendo al podio 11 veces en 14 carreras. Su rival más tenaz era su compañero de equipo, Clay Regazzoni. Regazzoni era un competidor feroz y no tenía reparos en competir duramente con Lauda. Los dos pilotos mantenían una fuerte rivalidad, pero también mucho respeto mutuo. Ferrari dominó y los aficionados, entre la emoción, enloquecieron de alegría.
El accidente de Nurburgring y la remontada de Monza
En 1976, Lauda, que lideraba el campeonato, sufrió un terrible accidente durante el Gran Premio de Alemania. Su Ferrari se incendió tras chocar contra el terraplén rocoso que bordeaba esa parte de la pista, y quedó atrapado en el coche durante casi un minuto antes de ser rescatado. Arturo Merzario, Guy Edwards y Harald Ertl le sacaron de entre los restos de su coche en llamas y le salvaron la vida. Niki sufrió quemaduras graves en la cara y los pulmones y sus posibilidades de sobrevivir eran escasas. Sin embargo, se recuperó de forma notable y no volvió a competir hasta seis semanas después en Monza, con las lesiones aún curándose. Entonces demostró una voluntad y un valor sobrehumanos, ponerse y quitarse el casco era muy doloroso y seguía utilizando apósitos protectores para sus heridas. Tras clasificarse en décima posición, consiguió terminar cuarto en la carrera, Niki estaba de vuelta y el campeonato del mundo parecía aún al alcance de la mano. Sólo habían pasado 42 días desde la competición alemana, pero parecía toda una vida.
Sin embargo, no todas las historias acaban bien, y 1976 terminó con la retirada de Lauda en el mojado Gran Premio de Japón, cediendo el título a Hunt por un solo punto. Lauda consideró que era demasiado peligroso correr en la pista de Fuji ese día y, coherente como siempre, se detuvo. El ingeniero Forghieri, director técnico del equipo de Maranello, estaba dispuesto a decir una mentirijilla recurriendo al clásico “fallo eléctrico”, pero Lauda no quiso saber nada y dijo su verdad. La relación con el gran hombre del automovilismo mundial empezó entonces a agriarse.
Los años con Brabham y la retirada de 1979
En 1977, sin embargo, hubo una vuelta a la “normalidad”: Lauda ganó su segundo Campeonato del Mundo, pero dejó Ferrari por Brabham debido a algunos desacuerdos y malentendidos surgidos en el difícil periodo entre el accidente de Alemania y su retirada de la carrera de Japón. Terminaba así la colaboración entre el piloto austriaco y la escudería de Maranello, que en cuatro años había dado dos títulos mundiales, un segundo y un cuarto puesto. Qué tiempos.
En 1978, Lauda se puso al volante del Brabham de Bernie Ecclestone. Niki tenía un coche rápido pero poco fiable y la temporada estuvo marcada por una larga serie de abandonos; ganó dos carreras en Suecia y Monza y fue cuarto en la general.
En 1979, el rendimiento del equipo británico cayó en picado debido a problemas de fiabilidad y a un coche poco competitivo. Al final de una sesión de entrenamientos del Gran Premio de Canadá, Lauda decidió retirarse de las carreras con efecto inmediato… se lo comunicó a Ecclestone y regresó a Austria para dedicarse a tiempo completo a dirigir su propia compañía aérea, Lauda Air, que había fundado ese mismo año.
McLaren, regreso y triunfo
La nueva aventura le va bien a Lauda, pero es evidente que le falta la adrenalina de las carreras. En 1982 decidió volver, en parte gracias a una supercontratación de 3 millones de dólares, con McLaren. Fue un buen año en el que ganó dos carreras y terminó el campeonato en quinto lugar. Después de semejante remontada uno espera grandes cosas… en cambio 1983 es un año para olvidar. Sin embargo, el triunfo llegó en 1984, cuando Lauda ganó su tercer Campeonato del Mundo, superando a su compañero de equipo, Alain Prost, por sólo medio punto.
Lauda como hombre
Fuera de la pista, Lauda era conocido por su personalidad franca y su sentido del humor, y a menudo respondía con ingenio a las preguntas de los periodistas. Cuando le preguntaron si le gustaría que se modificara el reglamento, respondió en una ocasión: “Sí, me gustaría que se sustituyeran los coches de carreras por aviones. Así ganaría todas las carreras”. También era conocido por su afición a la buena comida y al vino, y a menudo se permitía ambas cosas incluso cuando estaba en plena actividad.
Era muy reservado y no le gustaba hablar de su vida privada. Se casó dos veces y tuvo dos hijos, Mathias y Lukas. Mathias siguió los pasos de su padre y se convirtió en piloto de carreras profesional; actualmente colabora con AstonMartin como piloto oficial en el FIA WEC y Lukas es su mánager.
Lauda, pasión por los aviones y asesoramiento en Fórmula 1
Lauda era un apasionado de la aviación y tenía licencia de piloto comercial. En 1979 fundó Lauda Air, conocida por su alto nivel de seguridad y excelente servicio, y al cabo de unos años la vendió a Austrian Airlines. Más tarde fundó y dirigió varias aerolíneas de bajo coste y de ocio. Dos veces por semana pilotaba personalmente su avión comercial, el capitán Niki Lauda.
Tras retirarse, Lauda también trabajó como asesor para varios equipos de Fórmula Uno, entre ellos Ferrari y Jaguar, como director de equipo. Por cierto, en 2002 se subió al Jaguar y lo probó en Valencia, 18 años después de su última temporada de competición. En 2012, fue nombrado presidente no ejecutivo del equipo de Fórmula Uno Mercedes-AMG Petronas y desempeñó un papel clave en el éxito del equipo en los años siguientes hasta su fallecimiento en 2019.
La gente recuerda su estilo directo y su capacidad para estar por encima de la política deportiva.
Relaciones con otros pilotos
Lauda tenía una relación complicada con los demás pilotos. Se le respetaba por su habilidad al volante y su determinación para ganar, pero también podía ser abrasivo y conflictivo, decían de él:
Alain Prost ‘Niki fue un gran campeón y un gran hombre. Siempre fue muy justo en la pista y muy directo fuera de ella. Fue uno de mis competidores más duros, pero siempre nos tuvimos mucho respeto”.
Lewis Hamilton, que ganó el Gran Premio de Mónaco 2019 con un casco con un diseño en homenaje a Lauda, dijo “Niki era una leyenda del deporte y fue un honor conocerle. Logró tanto en su vida, tanto dentro como fuera de la pista, y siempre será recordado como uno de los grandes”.
Sebastian Vettel “Niki fue una auténtica inspiración para mí, como piloto y como persona. Era un luchador y nunca se rindió, ni siquiera en los momentos más difíciles. Le echaremos mucho de menos.
Damon Hill “Niki fue un gran piloto y un gran embajador de este deporte. Tenía una mente aguda y un gran sentido del humor, y siempre decía lo que pensaba. Será recordado como uno de los verdaderos personajes de este deporte”.
Gerhard Berger “Niki fue mi amigo y mentor, y aprendí mucho de él. Era un gran piloto y un gran hombre de negocios, y tenía una perspectiva única del deporte. Todos los que le conocieron le echarán de menos”.
David Coulthard: “Niki Lauda era un gigante de este deporte y su fallecimiento es una gran pérdida para toda la comunidad de la Fórmula Uno. Nunca será olvidado”. Nunca se olvidará”.
Carreras inolvidables
La carrera de Niki Lauda estuvo llena de momentos que quedarán grabados para siempre en la historia de la Fórmula 1. Éstos son los que recuerdan los viejos aficionados:
1974 Gran Premio de España: primera victoria de Lauda en la Fórmula 1. El austriaco dominó la carrera poniéndose inmediatamente en cabeza, su ritmo fue tal que dobló a casi todos sus rivales y terminó con más de un minuto de ventaja sobre el segundo clasificado.
Gran Premio de Mónaco de 1975: Lauda gana la carrera a pesar de tener problemas con la caja de cambios durante gran parte de la misma. A pesar de una lesión en la muñeca, Lauda realizó una carrera impecable y se llevó la victoria.
Gran Premio de Italia de 1975: Esta fue una carrera crucial para la temporada de Lauda, que ganó el campeonato. Salió desde la pole position, pero tuvo que luchar con su compañero de equipo Clay Regazzoni durante gran parte de la carrera. Al final ganó por poco más de un segundo.
El Gran Premio de Gran Bretaña de 1976: Fue una victoria muy reñida para Lauda, que tuvo que adelantar a James Hunt en los últimos compases de la carrera.
Sin duda, uno de los momentos más emblemáticos de la carrera de Niki Lauda fue su decisión de retirarse en el Gran Premio de Japón de 1976, que acabó dando el título de campeón a su principal rival, James Hunt. La carrera se disputó bajo una lluvia torrencial y Lauda, que había sufrido un terrible accidente a principios de temporada, consideró que las condiciones eran demasiado peligrosas para continuar. A pesar de su ventaja en la clasificación del campeonato, decidió retirarse de la carrera tras sólo dos vueltas. Hunt ganó la carrera y se llevó el título por un solo punto. La decisión de Lauda fue controvertida en su momento, pero demostró su integridad y compromiso con la seguridad, incluso a costa de un título de campeón. En años posteriores, Lauda y Hunt se hicieron muy amigos y su rivalidad y respeto mutuo se convirtieron en el tema de la película “Rush”.
Gran Premio de Sudáfrica de 1977: victoria dominante de Lauda, que lideró todas las vueltas de la carrera y terminó con más de un minuto de ventaja sobre el segundo clasificado.
Gran Premio de Alemania de 1977: batalla clásica entre Lauda y su principal rival, Jody Scheckter. Los dos intercambiaron el liderato varias veces, pero fue Lauda quien se impuso, en el año en que consiguió ganar su segundo campeonato del mundo.
1982 Gran Premio de Estados Unidos, Long Beach: fue la primera victoria de Lauda en su regreso a la Fórmula 1. Partiendo desde la tercera posición de la parrilla, escaló hasta el liderato y volvió a subir al podio.
Gran Premio de Portugal de 1984: última carrera del año, tensa batalla entre Lauda y su compañero de equipo.
Pictures from the top: Christian Sinclair, Niki Lauda, driving his Scuderia Ferrari at the 1975 United States Grand Prix, Creative Commons Attribution 2.0 Generic license. Martin Lee, Niki Lauda - Ferrari 312T2 approaches Druids at the 1976 Race of Champions, Brands Hatch, Creative Commons Attribution-Share Alike 2.0 Martin Lee, Niki Lauda at the 1982 British Grand Prix, Creative Commons Attribution-Share Alike 2.0 Generic license. Thomas Ormston, Susie Wolff and Niki Lauda, Creative Commons Attribution 2.0 Generic license.
